Cuando tu lectura es alcista… pero no necesitas un cohete
Hay veces que no hace falta que el precio se dispare. Te basta con que no caiga por debajo de una zona que el mercado ha respetado varias veces. Ahí es donde el Bull Put Spread (también llamado put credit spread) cobra sentido: diseñas una estructura que te paga por adelantado y gana dinero si el activo sube, se queda lateral o incluso cae un poco sin perder ese soporte clave. Es una forma serena de “ponerse alcista” sin necesitar titulares épicos.
En mi caso, lo trabajo y lo sigo en ProRealTime v13: gráficos limpios, cadena de opciones a un clic y un Analizador que me dibuja el perfil de resultados en cuanto muevo strikes. Menos ruido, más foco.
Qué es un Bull Put Spread (sin tecnicismos innecesarios)
La estructura nace de dos piezas: vendes una put por debajo del precio actual (en la zona que crees que aguantará) y, para ponerle techo al riesgo, compras otra put todavía más abajo. Al hacerlo, entra en tu cuenta un crédito neto (la prima). Tu beneficio máximo es precisamente esa prima; tu pérdida máxima queda acotada por la distancia entre strikes menos el crédito cobrado. La posición tiene theta positivo (el tiempo te ayuda), vega negativo (le sienta bien que caiga la volatilidad) y un delta ligeramente alcista.
Me gusta visualizarlo así: trazas un “suelo” con tus puts. Mientras el mercado respete ese suelo a vencimiento, te quedas con la prima. Si el precio se comporta mejor de lo esperado, también; si patina un poco, aún puedes ganar.
Un número redondo para fijar ideas
Imagina el subyacente en 100. Yo vendo la Put 95 y compro la Put 90. El mercado me paga, por ejemplo, 1,20 € de crédito neto por contrato. Eso significa que mi beneficio máximo son 120 € por contrato si, al vencimiento, el precio cotiza en 95 o por encima. La pérdida máxima sería 5,00 − 1,20 = 3,80 € (380 € por contrato) si finaliza por debajo de 90. El punto de equilibrio queda en 95 − 1,20 = 93,80. Todo definido antes de empezar.
Del gráfico a la orden en ProRealTime v13
Abro el subyacente en ProRealTime, marco en el gráfico el área donde “no debería” romperse el soporte, y lanzo la cadena de opciones. Con la plantilla de Bull Put seleccionada, muevo los strikes como si estuviera colocando fichas: el Analizador actualiza al instante el payoff con beneficio máximo, pérdida máxima y breakeven. Si la volatilidad implícita está generosa, mejor: el crédito sube y el spread tiene más sentido.
En el ticket de confirmación reviso cantidades, bid/ask y margen requerido. Casi siempre entro con orden limitada apuntando al mid para rascar unos céntimos extra de prima; si la liquidez flojea, prefiero no apurar y priorizar ejecución. La idea es que el tiempo trabaje para mí, no pelear cada décima eternamente.
El contexto que busco
Me funciona cuando veo soportes claros, rechazo repetido en una zona y flujo de noticias tranquilo. También cuando el mercado corrige, llega a una referencia técnica seria (media de 50/200, antiguo máximo) y “amortigua”. Si además la volatilidad implícita está alta, suele ser un buen momento: cobro más por la misma estructura.
Gestión cuando el precio aprieta hacia abajo
Si el subyacente acelera contra mi zona vendida y la lectura cambia, tengo tres caminos: cerrar y asumir una pérdida controlada, rodar el spread a un vencimiento posterior para recuperar theta, o desplazar el conjunto más abajo (manteniendo la distancia entre strikes) si el crédito adicional compensa. Antes de tocar el botón lo pruebo en el Analizador de ProRealTime: muevo strikes, fechas, veo el nuevo perfil exacto y decido en frío. La disciplina aquí paga sola la factura.
Checklist mental (corto, pero importante)
¿Hay earnings o evento macro antes del vencimiento? ¿Dividendo que pueda alterar precios o asignaciones? ¿De verdad ese “soporte” lo es, o me lo estoy inventando? ¿La prima compensa el riesgo definido y el margen que inmovilizo? Si a esas preguntas les doy respuesta sensata, entonces sí: envío la orden y dejo que el tiempo haga su trabajo.
Por qué vuelvo a él una y otra vez
El Bull Put Spread me permite cobrar hoy por sostener un escenario razonable: que el precio respete un suelo durante unas semanas. Si el mercado acompaña, la prima se queda conmigo; si no, la pérdida está medida desde el primer minuto. Y todo el proceso —lectura, construcción, gestión y ajustes— lo hago sin salir de ProRealTime v13, para que la técnica no me robe foco del verdadero protagonista: el precio y su historia.